Pedro Quesada es un joven extremeño que la música que ha oído gran parte de su vida ha sido la de la costa malagueña y el tintineo de los hielos de sus cócteles.
Su pasión es ser bartender y, como tal, nos muestra sus dotes de profesionalidad desde la barra de Restaurante Arabike.
Talento y simpatía no le faltan, a la par que profesionalidad y técnica para elaborar combinaciones refrescantes que abren el apetito y sacian la sed.